Existen diversas formas de poder dormir, y una de las más interesantes es en base al uso de un colchón de agua, el cual le hace honor a su nombre debido a que el líquido material es con el cual se encuentra relleno. Obviamente esto también va a terminar afectando algunas cuantas funciones básicas en lo que podría ser un colchón de resortes, como por ejemplo el hecho de no tener una estabilidad fija debido a los movimientos propios del agua, lo cual brinda cierta sensación de movimiento similar al ser mecido. Tampoco olvidar que terminan siendo más blandos, lo cual al fin al cabo también ayuda a una mayor relajación física.
Lejos de lo antes mencionado, los colchones de agua no tienen que presentar mayores diferencias con relación a uno normal, no variando mucho su forma al respecto, encajando a la perfección en cualquier cuarto. Se suele pensar que estos colchones pueden llegar a ser más exóticos que uno común, pero al fin al cabo la finalidad termina siendo siempre la misma: el poder brindar el mayor confort posible.
Como bien dice el artículo, hay que asegurarse que este tipo de colchón nos sea cómodo, ya que no a todo el mundo le gustan los colchones blandos. Los espertos aún no están muy seguros que sean muy saludable, ya que no todos tienen un buen apoyo para la columna vertebral.
Un saludo,
Laura García
Dormitia