Por ejemplo, en caso de tratarse de un hogar de imagen arquitectónica clásica lo mejor puede ser contar con un reloj clásico que bien se podría conseguir en tiendas de antigüedades, siendo además un artículo valioso debido a poseer valor inclusive histórico. Esta clase de relojes bien pueden mantener tanta fuerza de imagen o más de lo que podría ser un cuadro, teniendo una imagen fuerte.
En cambio, para el caso de cuartos de jóvenes bien podemos encontrar relojes mucho más informales y de actitud moderna, sirviendo para darle mayor carácter a alguna pared que se encuentre muy vacía o carente de fuerza por carente de detalles visuales que brinden peso de imagen.