Las puertas de tipo correderas son una buena opción en lo que concierne a practicidad donde se sacrifica la clásica usanza de las puertas por una mucho más práctica y puede que considerable también como moderna donde se ahorra lo que viene a ser espacios y no se requiere de mayores esfuerzos físicos para poder lograr pasar de un ambiente a otro. Su nombre mismo llega a darnos una idea sobre cómo es que esta clase de puerta llega a funcionar, pudiendo dejarla correr hacia un espacio lateral con tan solo un ligero empuje para dejar espacio abierto y pasando la puerta a quedarse casi pegada a una pared.
Esta clase de puertas no se recomienda para lo que viene a ser entradas de casas, resultando demasiado ligeras. Más bien se llega a optar en su caso para lo que es separaciones de ambientes comunes de un hogar como puede ser algunas habitaciones o el paso de sala a comedor u otros casos similares. Se recomienda para hogares de decoración moderna e incluso vanguardista.