Dentro de la construcción de edificios un término nuevo que se está presentando es el de los denominados edificios inteligentes, el cual es mucho más que un simple recinto en el cual nosotros vamos a poder trabajar, aprovechando todo su entorno para poder terminar creando un ambiente mucho más provechoso. Lo que se busca en todo edificio inteligente es poder buscar una mayor optimización para lo relacionado a la estructura, sistemas, servicios y administración. Viendo todo esto está de más indicar que los edificios inteligentes tienen más relación con oficinas de negocios que con ambientes donde vivir.
Una parte importante de los edificios inteligentes es el poder ahorrar energía cuando sea necesario, es decir generalmente cuando no exista personal trabajando o bien tratando de bajar el consumo para cuando este esté presente, para ello se busca la implementación de sistemas especiales que permitan causar ahorros de energía eléctrica o bien detecten la ausencia de personal gracias a sensores de movimiento. Inclusive el crear una mejor ventilación del ambiente es un pequeño detalle que puede evitar alto consumo de aire acondicionado o calefacción.
Pese a todo esto, hay que entender que en los edificios inteligentes va a haber siempre un alto número de personas, ante lo cual se debe buscar el mejor método de comodidad que gracias a su flexibilidad no afecte al grupo o parte de él.