El uso de vinilos decorativos en puertas es una tendencia actual que resuelve tanto una necesidad decorativa como práctica. Muchas veces cuando nos mudamos a un lugar nuevo hay pequeños detalles que no nos gustan, como las puertas. Sacar una puerta y mandar a hacer otra implica un costo elevado, mientras que ponerle un vinilo con una ilustración buena es mucho más económico.
La decoración con vinilos puede cambiar mucho el aspecto de un lugar; ya sea con ilustraciones, texturas, colores o símbolos, un vinilo puede contribuir a darle vida a un lugar o potenciar un efecto decorativo.
Existe una lista interminable de diseños de vinilos para puertas que ofrecen al decorador la oportunidad de personalizar su espacio. Hay vinilos con imágenes de paisajes naturales, cielos despejados, arena, rocas, etc.; hay vinilos más conceptuales que tienen símbolos, logos, frases, ideogramas, etc. Hay vinilos que juegan con la perspectiva y que producen un efecto sorprendente como escaleras, caminos que se cierran en el horizonte, etc., y una lista interminable de diseños. Si el decorador considera que ningún diseño es lo suficientemente personal, puede optar pedirle a una empresa que fabrica vinilos, que haga de una foto suya – por supuesto con una buena resolución- un vinilo autoadhesivo.
Los vinilos están hechos de policloruro de vinilo, un material muy resistente que garantiza una larga duración al producto. Antes de pegar tu vinilo asegúrate que la superficie sea plana y sin imperfecciones como huecos y que la pintura esté seca – nunca ponerlo sobre una pared recién pintada-. La puerta también debe estar limpia, sin grasa ni polvo.
El tamaño de los vinilos es estándar, con un ligero margen de variación por si hay puertas más anchas o altas. Si hay puertas que no son de tamaño estándar, la empresa de vinilos puede hacer una medida especial.