Se suele considerar al colchón de espuma como una alternativa económica dentro de la gran variedad de alternativas que se suele encontrar con relación a estos elementos para la habitación, pero no dejemos que esta idea nos engañe, existiendo también una gran cantidad de detalles que deberíamos conocer para entender de mejor manera sus cualidades.
Generalmente lo que salta a la vista es la densidad en sí de los colchones, pudiéndose verificar esta información según los kilos por metro cúbico que llegue a poseer, siendo el mínimo recomendado al respecto los 25 Kg./m³. Aparte también se debe tomar en cuenta la altura que presente el colchón en cuestión, donde se recomienda que tenga por lo menos unos 20 centímetros de largo. El material que presentan en sí se llama poliuterano, habiendo pasado un largo camino para que se perfeccione a tal punto como lo conocemos hoy en día, habiéndose perfeccionado tecnológicamente para que sean mucho más higiénicos y no tengan problemas de deformidad con el uso constante. Aunque también hay que tener en cuenta que para evitar problemas de hundimiento (el cual no está soluciona completamente) o exceso de calor mejor se termine optando por uno de resortes.