Al momento de idear un baño dentro de un hogar familiar bien se puede tener un grave problema con relación a lo que viene a ser las necesidades propias de los niños más pequeños. Esto termina siendo muy notorio en lo concerniente a los retretes, siendo lo más común que los niños no puedan llegar a la altura establecida como para poder sentarse en ellos con comodidad. Lo más común a lo que los padres suelen llegar a recurrir es al uso de pequeñas bancas para que los menores puedan “trepar” hasta el asiento del retrete, lo cual no es al fin al cabo la solución más recomendable.

Hoy en día se puede encontrar la presencia de retretes especiales que se adaptan muy bien al tamaño de los niños, siendo justamente mucho más chatos para que lleguen a sentarse, teniendo también el resto de proporciones mucho más ajustadas a su anatomía. Tampoco olvidar lo que es las llamadas bacinicas, los cuales suelen ser utilizados para que los niños que están saliendo de la etapa de bebé puedan realizar sus primeros intentos de ir al baño por su propia cuenta, siendo inclusive portátiles para poder ser llevados a cualquier parte o bien dejarlos en la habitación del infante.