El concepto detrás de los hoteles boutique no se puede considerar como demasiado antiguo, llevando a lo más unas tres décadas de existencia, habiendo tenido su primer boom en Nueva York, ciudad en donde aparecieron como una alternativa distinta donde se da un mayor énfasis en otorgar también un estilo único a cada aspecto arquitectónico, siendo generalmente moderno y muy cercano a las áreas de mayor movimiento y comercio de cada ciudad; de similar manera el servicio que se busca otorgar en un hotel boutique es personalizado y más acogedor.
Los hoteles boutique por lo general cuentan con decoración lujosa y de buen gusto. En la mayoría de casos disponen de una personalidad propia que los distingue de los demás, y se centran en un diseño y decoración bajo los conceptos de privacidad, tranquilidad, elegancia, romanticismo, sofisticación y arte.
Muchos hoteles boutique alrededor del mundo de ubican en edificaciones históricas de gran valor arquitectónico que han sido acondicionadas para el hotel.
También existen hoteles boutique temáticos así como hoteles vanguardistas y minimalistas.