El Cestrum nocturnum también conocida como dama de noche, galán de noche o jazmín de noche, huele de noche o hediondilla es una planta de la familia de las solanáceas, originaria del continente americano, específicamente del centro-sur de México y Sudamérica.
Se trata de una planta ornamental, perfecta para tener en macetas o jardines en exteriores. Produce flores pequeñas pero muy bonitas, con un olor delicioso durante las noches de primavera y verano.
Características
Se trata de un arbusto que alcanza un tamaño de 1 a 5 metros de alto, con ramitas largas y semi colgantes de 70 centímetros de largo aproximadamente.
Sus hojas son ovadas o elípticas de unos 6 a 11 centímetros de largo con ápice acuminado y de color verde.
Cuenta con muchas flores tubulares de color blanco o amarillo verdoso, nocturnas y fragantes. ¡Sí, sus flores se abren por la noche!
El fruto es un baya globosa, de hasta 7-10 mm de largo.
Beneficios
El extracto de esta planta es sido empleado como antiespasmódico, especialmente en el tratamiento de la epilepsia.
También es utilizada como para las erupciones cutáneas.
Cuidados
El Cestrum nocturnum es una planta muy fácil de cuidar y mantener. Su crecimiento es rápido.
Se puede cultivar perfectamente en ambientes con climas templados, suaves y cálidos con un suelo con buena humedad y drenaje para evitar que las raíces se pudran.
Necesita de exposición a pleno sol y semi sombra. Si se le pone a la sombra completamente tendrá dificultad para dar flores.
La temperatura óptima suele estar entre 18º y 25º. El frío no les sienta bien, pero puede soportar temperaturas hasta los -2ºC.
Se le debe de regar frecuentemente durante la época de verano y en menor cantidad durante el resto de estaciones del año. Se recomienda regarlas cada 2 días durante los meses de más calor, y cada 4 días el resto del año. El exceso de riego, genera manchas oscuras en las plantas.
También es importante mencionar que durante la primavera y el verano es necesario abonarla.
Se recomienda podarle las ramas durante la temporada de invierno.
El galán de noche es susceptible a plagas como los pulgones, las moscas blancas y las arañas rojas.
Toxicidad
Es una gran productora de la sustancia solanina, un alcaloide tóxico. Casi todas las partes de la planta son altamente tóxicas no al tacto, pero sí, si se ingieren. Por ello se debe tener cuidado con niños pequeños y animales domésticos.
El envenenamiento se manifiesta con los síntomas como debilidad y hasta parálisis de los miembros inferiores, dilatación de la pupila, estupor muy fuerte, náuseas, vómitos, respiración irregular, y hasta la muerte.