Una de las partes más trascendentales al momento de idear la construcción de un hogar es la fachada de esta misma, siendo justamente lo que se llega a mostrar al resto de personas que comúnmente pasan a caminar por la calle donde esta misma se encuentra. Lógicamente lo más común es querer hacer que brinde un aspecto agradable y que al mismo tiempo mantenga toda una ilación temática con lo que se refiere al estilo del resto del hogar.
Pongámonos ahora en el caso específico de lo que viene a ser las casas pequeñas, siendo el gran problema el tener que aprovechar el escaso espacio de la fachada para dar un acabado interesante ¿Qué hacer en esos casos? La respuesta puede que no sea muy sencilla pero tiene sus características propias, por ejemplo puede que el espacio solo de para una puerta común y otra para la cochera, en esos casos el énfasis debe caer en el acabado que presenten estas mismas ya sea en color, tipo de material y si es madera en el barniz protector.
En caso de tener solo una puerta común nos queda toda una pared libre, la cual se puede utilizar para instalar una gran ventana que brinde iluminación a la parte interna o bien darle un acabado especial en color o uso de técnicas conocidas como el empedrado o mayólicas que tanto gustan en ambientes urbanos de hoy en día.
Es importante tener en cuenta la frontalidad de la fachada. En este punto tengamos en cuenta si es que se puede poseer aunque sea unos cuantos metros para poder utilizarlos para el poder idear una entrada con jardín, lo cual suele agregar una mayor belleza estética natural y de carácter familiar, e inclusive una mayor pasividad. Las entradas con jardín asimismo suelen darle una menor necesidad de mayor impacto visual a la fachada, en caso contrario ya llega la necesidad de tener que encontrarle mayor fuerza de imagen a la fachada de la casa en sí, ante esta necesidad algunos tips.
Todo depende al fin al cabo del tipo de casa que uno esté buscando manejar, a lo mejor buscas algo práctico pero sencillo al fin al cabo, ante ello lo primordial es el seleccionar un buen tono fuerte de pintura que no haga demasiado contraste con el resto de casas de la cuadra si es que notamos un patrón en tonalidades al respecto, luego selecciona un segundo color que resalte o cause cierto contraste o complementarismo para algunos detalles como puertas, marcos o balcones. Este puede ser el consejo más práctico y sencillo al respecto.
Ahora vamos por el lado contrario del asunto, la posibilidad de poder lograr un trabajo mucho más elaborado. Aquí puede ser donde los detalles principales se encuentran en el nivel de elaboración de algunos detalles o adornos. Toma el caso de las puertas, las cuales llegan a poder tener la posibilidad de mantener un trabajo de tallado especial si es que son de madera, algo similar ocurre con el marco de las ventanas e inclusive la posibilidad de utilizar faros u otra clase de ornamentos. Si cuentas con un segundo piso la aplicación de un balcón puede cubrir tanto necesidades estéticas externas como ampliación de un espacio interno.