No hay nada como dormir bajo un techo seguro y unas paredes firmes que puedan resistir el paso del tiempo, y uno de los mejores materiales a considerar para construir nuestra casa es el cemento, un elemento clásico y muy versátil.
El primer factor que nos anima a optar por el cemento es su durabilidad. Las viviendas construidas con bloques de cemento son mucho más duraderas que las que se edifican con ladrillos. Asimismo los bloques no son susceptibles de pudrición como lo son las casas de madera.
Las casas de cemento son sumamente fuertes y sólidas, y por ello pueden erigirse en áreas de condiciones climáticas severas sin ningún tipo de preocupación. Los bloques de cemento son muy resistentes frente a vientos fuertes, terremotos e incendios.
Otra de las ventajas de las casas de cemento es que son energéticamente eficientes. Los bloques de cemento ayudan a mantener el calor y la humedad durante las temperaturas cálidas y son frescas durante el invierno.
También debemos hablar de la versatilidad del material que permite dejar volar la imaginación en cuanto al diseño y decoración de la vivienda. Se puede utilizar el cemento ya sea pulido o rústico, dependiendo si buscas un look industrial y minimalista o algo más rural. Además no hay por qué conformarse con el gris del exterior de la fachada sino que podemos pintar las paredes del color que queramos e inclusive tenemos la posibilidad de combinarlo con otros materiales tales como la madera o la piedra para darle un toque más lujoso. Igualmente tenemos la opción de construir techos altos si así lo deseamos, desvanes en el interior, columnas, arcos y demás elementos de estética que nos gusten.
Finalmente te interesará saber que las casas construidas en cemento son también económicas, y es que el costo de la tasa del seguro es barato.